En la noche con tu cuerpo junto al mío, como quise tenerte muchas veces, descubrí que no queda nada del deseo que conocías y me hacia estremecer de vos; de lo que nunca te conté tampoco queda nada, solo el recuerdo de lo que pudo haber sido y no fue, quizás por que andábamos mas ocupados en otros asuntos, por poner a alguien por encima de nosotros, por el afán de hacer perpetuar a esos otros a nuestro lado y que hoy mirando atrás no eran tan indispensables en nuestras vidas, por no entender que la vida nos va dando los caminos, que la mayoría de veces no tomamos y que quizás hubiesen sido los mejores, si no, pues nos hubiésemos vivido, olido, amado, odiado. Si la cobardía no hubiese primado quizás tendríamos una colección de besos y lunas juntos, pero esto es lo que no fue y aunque nos demos nuevas tardes para cafés y noches para caminar la ciudad en absoluta ebriedad y cero preocupación, los versos hermosos, suspiros y la luz que atraviesa las hojas de un árbol de parque directo h...